‘El embarazo es una etapa que marca la vida de la mujer’
Esta frase la habrás leído en más de una ocasión desde que estás embarazada. Es cierto que el período por el que estás pasando es un momento de muchos cambios fisiológicos y psicológicos. Por suerte, ¡tienes nueve meses para ir asimilando estos cambios!
En este momento has empezado a compartir tu vida con alguien que todavía no conoces pero ya le tienes un cariño especial. Ahora es necesario seguir unos cuidados que te beneficiaran tanto a ti como a él, que está en pleno desarrollo. El primer paso antes de cuidar al bebé es cuidar a la madre.
Sabemos que el embarazo no es una enfermedad, todo lo contrario. Es un hecho para el que toda mujer está perfectamente preparada. Todo y con eso, no todos los embarazos son iguales, porque no todas las mujeres son iguales. Sabemos que durante este tiempo aparecen dudas, expectativas y un sinfín de emociones que se plantean la mayoría de las mamás. Conocer los pasos y etapas ayuda a estar segura y fuerte frente a lo que está por venir. Es probable que tu médico o matrona solucione algunas de ellas, pero nosotros queremos ser un apoyo para que puedas volver a leer y recordar los puntos importantes.
CAMBIOS DURANTE EL EMBARAZO
Durante los próximos nueve meses los cambios se van a ir presentando poco a poco, empezando por los físicos:
- El crecimiento del útero para permitir espacio al bebé y convertirse en un órgano fuerte capaz de expulsarlo el día del parto.
- Cambios hormonales (estrógenos, progesterona)
- Cambios de apetito en las primeras semanas. Pueden aparecer vómitos y nauseas a lo. largo del día, siendo la mañana el momento de más intensidad, debido a la hormona HCG (Hormona coriónica humana)
- Los pechos se vuelven más sensibles, aumentan su tamaño y adquieren un tono más oscuro en la areola y el pezón.
- La piel también es sensible a los cambios hormonales y pueden aparecer manchas en la cara, en los genitales y en la zona alba.
- El aumento de peso es de 8 a 12 kg durante todo el proceso de embarazo, siendo el último trimestre el momento de mayor aumento.
- Aparición de estrías en abdomen, mamas, piernas y caderas. Suelen tener un color rojizo d que se produce por una destrucción del colágeno de la piel debido al estiramiento. Por ello es importante hidratarse mucho, tanto externa como internamente.
- El corazón aumenta su frecuencia de latidos por minuto, disminuye la tensión arterial y la circulación sanguínea es más lenta, sobre todo en la zona de las piernas ya que el útero empieza a ejercer peso y eso dificulta el retorno venoso pudiendo aparecer varices e hinchazón en los pies.
- Los pulmones empiezan a tener menos espacio hacia el tercer trimestre y eso contribuye a que cambien su ritmo aumentando así el número de respiraciones por minuto. Es posible que notes algo de dificultad respiratoria, pero es totalmente normal durante el embarazo.
- El aparato urinario también se verá afectado por el tamaño y el peso del útero comprimiéndose y provocando la necesidad de orinar con más frecuencia.
- Aparecen ardores de estómago consecuencia del cambio de posición del estómago causado por el crecimiento uterino.
- Las encías pueden sangrar con cualquier contacto, por lo que deberías visitar al dentista en las primeras semanas para realizar una revisión.
- El intestino cambia su motilidad debido a la acción de la progesterona y la compresión que ejerce el útero. La manera de mejorar esta situación es practicar ejercicio físico moderado.
- La estructura muscular y ósea se prepara y sufre cambios, como la lordosis, que ayudan a compensar el aumento de peso en la parte anterior arqueando la columna. Estos cambios hacen que aparezca el caminar característico de la embarazada y dolores en las lumbares y en las cervicales.
Además de estos cambios físicos pueden aparecer cambios psicológicos durante el embarazo como:
- Irritación
- Cambios frecuentes de humor
- Temores hacia lo que está por venir
- Sentimientos de rechazo, tristeza, preocupación, alegría
Todos estos cambios son completamente normales, así que no debes preocuparte. Es un buen momento para estar acompañada y pedir apoyo por parte de la pareja y la familia, si lo necesitas.
Verás que esta sensación mejora en el segundo trimestre de embarazo ya que al notar los movimientos del bebé hace que muchas preocupaciones y dudas desaparezcan.
No sólo la madre experimenta cambios, la pareja también puede mostrar signos de preocupaciones, alegrías, temor e incluso celos. Por ello es necesario que exista una buena comunicación para compartir las emociones y decisiones acerca del bebé.
A partir del tercer trimestre es normal que estéis impacientes e inquietos por saber cómo será el parto, el momento de conocer a vuestro hijo y las dudas sobre qué cuidados debéis proporcionarle. No os preocupéis ¡Lo vais a hacer genial!
Atentos porque en la próxima entrada os hablaremos de cuáles son las recomendaciones para una embarazada en cuanto a alimentación, sueño, salud, etc.
